La diferencia está en la app
La pandemia puso de relieve la necesidad de gestionar eficazmente la entrega de comida a domicilio, la tecnología de Obvious Eat hizo el resto. Esta startup nacida hace poco más de un año en Santiago de Compostela, y que recientemente se ha expandido a Sant Cugat, apostó desde el principio por ofrecer un servicio diferencial a restaurantes y usuarios por igual. En el primer caso, bajar las comisiones que suelen cargar otras empresas del sector a más de la mitad, fue decisivo para llamar la atención de los restauradores. El hecho de ofrecer un servicio más rápido que el de la competencia gracias al diseño y desarrolllo de su app, atrajo a los primeros usuarios. Esta permite rastrear el estado del pedido desde que se realiza, gestionando cada una de las posibles incidencias al momento, con un chat ágil e interactivo, que también permite conectar con los repartidores para reducir el tiempo de espera. “Al contar con un equipo propio y un sistema de búsqueda óptimo, logramos reducir los recorridos y el tiempo de espera a una media de 30 minutos y un máximo de 45 minutos”, aseguran los responsables de Obvious Eat en Sant Cugat, Juan Antonio García y Félix Leonardo Juhasz. Por ello, estos emprendedores esperan seducir a los mejores restaurantes de la ciudad, con un servicio de delivery más económico, así como a los usuarios, a los que también sorprenderán con sus ofertas y promociones de su comida preferida.
Se trata de una herramienta de hasta un 50% más económica, con respecto a otras apps de delivery más conocidas.

La app conecta al usuario con el restaurante, el repartidor y Obvious Eat, en un chat ágil e interactivo.

Juan Antonio García y Félix Leonardo Juhasz son los responsables de Obvious Eat en Sant Cugat.
Uno de los retos de la app es reducir hasta 30 minutos el tiempo de espera.










