El tiempo de Alejandra Prat

“Llevo bien trabajar menos, no quiero perder un minuto de mis hijos”
Alejandra Prat, periodista y presentadora

Texto: Judith Martínez
Fotografía: Theresa Paul

Llega a nuestra cita en patinete, “te lo recomiendo, es lo más cómodo para ir por Barcelona”, imposible pasar desapercibida, esta mujer de más de un metro ochenta de altura, impecable rubia melena al viento, puntual, “mi tiempo vale tanto como el de los demás”, es educada, diría más que simpática, una sorpresa que detrás del rostro conocido, asiduo de las revistas del corazón, aparezca la persona, empática y dispuesta a ayudar en lo que haga falta. Nos vemos en la tienda de Susana Gil, Piccolo Mondo, donde encargó la decoración de las habitaciones de sus tres hijos, Adriana, Alejandro y Amaro. “Entré como clienta, y ahora es una de mis mejores amigas, pondría mi vida en sus manos”, explica. No sé si le pasa a menudo, pero estoy convencida que congeniar con ella no tiene que ser muy difícil. Conversamos con Alejandra Prat sobre su etapa más maternal.

¿Cómo llevas la maternidad?
Creo que es la etapa más maravillosa de la mujer, pero tal y como están las cosas, si te dedicas a los hijos y no trabajas, te resta puntos. Es algo que no acabo de entender, solo podemos tener hijos nosotras…

Es cuestión de prioridades
Entiendo que el trabajo sea la prioridad de otras mujeres, pero no es mi caso. Mi ego profesional está cubierto y tengo la suerte de tener un marido que me ofrece una estabilidad económica; Juan Manuel y yo hacemos un buen equipo.

“Si te dedicas a los hijos y no trabajas, te resta puntos”

 

Sin embargo, sigues teniendo proyectos
Es cierto que me gustaría abarcar más, y por ello continúo yendo a eventos y hago algo de publicidad. Intento no perderme nada, tanto a nivel familiar, como profesional. Pero, repito: si me dan a elegir, elijo a mi familia.

¿Echas de menos la tele?
Es mi mundo. Y los años de colaboradora con Ana Rosa Quintana y María Teresa Campos fueron maravillosos. Pero si ahora volviera atrás y pudiera elegir, me gustaría trabajar en informativos.
¿Qué cualidades destacas de estas profesionales?
María Teresa es una profesional como la copa de un pino, tiene una gran capacidad y experiencia en medios. Ana Rosa es familiar, cercana y divertida; ella es brillante.

Conversamos sobre su medio, la tele, “las revistas del corazón me interesan cero”, de su participación en la versión de Supervivientes para famosos, del programa sobre actualidad cinematográfica Cinemagazine, que presentó, y también de sus inicios, en la radio, cuando a los diecisiete años conducía un programa, “lo hacia todo, presentaba, buscaba los contenidos, producía, entrevistaba; fui una buena estudiante y estoy acostumbrada a buscarme la vida desde los diecisiete años”, recuerda.

¿Cómo llevas vivir en Barcelona?
Me encanta Barcelona. Es un ciudad fantástica, tiene mar, montaña, una calidad de vida excelente. Además, tengo buenos amigos.

¿Echas de menos Madrid?
Aquí es todo más recogido, de puertas adentro. En Madrid se sale las veinticuatro horas de los siete días de la semana. Echo de menos la improvisación, pero también agradezco poder descansar.
Cambiamos de registro. Tengo la oportunidad de desgranar una a una las cualidades de una Alejandra cercana, natural, opuesta a la imagen que arroja el papel couché, demasiado brillo para la gloria de los editores, o excesivamente mate, para desazón de los personajes. “Soy muy tímida”, reconoce, “pero he aprendido a gestionarlo”. Familiar, amiga de sus amigas, acude tres veces por semana a la escuela de baile Esther Bosch; “Me encanta bailar”.

“Soy muy tímida, pero con los años he aprendido a gestionarlo”

¿Cuál es tu mejor plan?
El fin de semana, plan familiar; en invierno nos encanta esquiar y en verano hacemos deportes acuáticos o excursiones en bici.
Tus sitios preferidos de la ciudad
Dos restaurantes: El Bonanova, por su tradicional cocina de mercado, fresca y variada; y el Pez Vela, con vistas al mar, ambiente fácil y muy adecuado para ir con niños.

Nos despedimos, “si necesitas algo más, ya tienes mi teléfono”, ella se queda para estar un rato con Susana Gil, que durante la entrevista solo ha salido un momento de su despacho situado en la planta de abajo para saludar. Faltaría más. Una amiga de verdad siempre tiene tiempo para sus amigas. “Luego haré un par de recados en mi patinete, y a casa”.


Piccolo Mondo cumplía todos los requisitos que Alejandra Prat buscaba para decorar las habitaciones de sus hijos, tanto estéticos como funcionales y de seguridad
Los tonos blancos y neutros del mobiliario de Piccolo Mondo fueron determinantes: “Soy muy clásica, muy de blanquito; no soy de lilas”

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