16 Jun Estudio Cordero y Viñas y DyD Interiorismo diseñan esta vivienda familiar de Terrassa

Por dentro y por fuera

Como es por fuera es por dentro. Eso dicen las tradiciones esotéricas al trazar la analogía entre cuerpo y espíritu. Este mismo concepto, aplicado a esta casa unifamiliar de Terrassa, explica el éxito de la simbiosis profesional que forman Estudio Cordero y Viñas y DyD Interiorismo. Lo que Jordi y Luis, con más de 15 años de experiencia arquitectónica, han realizado en el exterior, Chelo, con dos décadas de trayectoria como interiorista, lo complementa de puertas adentro. La asociación es fructífera.

Pese a ser empresas distintas, comparten espacio de trabajo y proyectos, beneficiándose de las sinergias existentes entre sus disciplinas. Chelo lo expone con claridad: “El interiorismo está muy unido a la arquitectura. Es una única historia que empieza desde el exterior y se desarrolla a medida que se conocen los espacios interiores”. Esta preciosa vivienda es un magnífico ejemplo tanto de la interconexión entre arquitectura e interiorismo como de la sintonía profesional entre Chelo, Jordi y Luis.

La vivienda está compuesta por cuatro materiales principales: piedra travertino, madera, vidrio y cinc, que se combinan armónicamente, entrando y saliendo de forma natural por todos los espacios de la casa. Como subraya Jordi, “nos gusta trabajar los volúmenes y los cuerpos, huyendo de lo tradicional, y adaptarnos a las necesidades del cliente. Tanto en arquitectura como en interiorismo hacemos trajes a medida, proyectos muy personalizados”. Requisito específico de este cliente fue, precisamente, el protagonismo de la luz natural. Algo que lograron con amplios ventanales e interrelacionando los distintos espacios con atractivas vistas cruzadas.

Uno de los espacios más logrados de esta moderna vivienda de cinco plantas es el gimnasio del sótano, con un elegante patio inglés, preciosos lucernarios sobre la piscina interior y dos generosos vidrios que permiten ver la piscina exterior desde el garaje. Otro mérito reseñable de este proyecto es que al caer la noche, la luz natural deja paso a una iluminación tan bien concebida como elegante. Chelo destaca que para lograr el ambiente cálido y acogedor que solicitó el cliente recurrió al “uso de colores y texturas naturales”.