15 Mar Vittorio Giordiano simplifica lo mejor de la cocina napolitana en Piccola Cucina italiana

Cocina italina sin trampa ni cartón

Vittorio Giordiano no es el único protagonista de Piccola Cucina Italiana, su atípico restaurante situado en la carretera de Vallvidrera a Sant Cugat. El menú de degustación con el que este napolitano de nacimiento “y catalán de adopción”, seduce a cada uno de los comensales que entra por la puerta del austero garaje en el que se ubica, demuestra  que “cocinar es un gesto de amor en forma de algo comestible”. Con un recetario propio de más de mil recetas de influencia alemana, francesa, y del magreb, propia de la cocina napolitana, Vittorio ha simplificado su carta, adaptándola a las limitaciones propias del espacio, ensalzando tomates cherry, berenjenas, calabacines y quesos, a la condición de estrella, tanto en sus sabrosos antipasti, como en la pasta, el plato principal. Acompañado de una reducida selección de vinos italianos, el menú, que también se puede encargar para llevar a casa, termina con una selección de postres, en la que no falta el tiramisú, el cannoli a la siliciala o el babá. Una oferta basada en la experiencia, los sabores simples y “la exigencia del comensal, que es quien hace la buena restauración”.

Vittorio Giordiano en su Piccola Cocina Italiana. Antipasti formado por burrata con tomates cherry, queso stracchino, peperonata de pimientos, judías blancas al estilo toscano y salteado de berenjenas agridulces.

Paccheri o macarrones con tomate y berejana a la parmigiana.