El cirujano que da la mano a sus pacientes Dr. Oriol Vernetta, cirujano plástico especializado en estética

“La cirugía estética combina técnicas básicas con creatividad”

 

En una época en que “la cirugía estética ha dejado de considerarse una subespecialidad menor de la cirugía reconstructiva”, el doctor Oriol Vernetta defiende con franca pasión los resultados de aplicar el rigor de la técnica con una visión creativa e integrativa, situando al paciente en el centro de un trabajo altamente personalizado que transforma vidas.

 

¿Por qué se decantó por la cirugía estética, plástica y reparadora? El hecho de venir de una familia de farmacéuticos, marcó mi interés por las ciencias de la salud. Sin embargo, mi vocación por la medicina fue bastante tardía. Sugió como un reto más complejo y lleno de matices, que se acentuó al descubrir la especialidad por la que me acabé decantando.

¿Qué le lamó la atención respecto a otras cirugías? La cirugía plástica me pareció la más interesante, compleja y versátil de las diferentes especialidades quirúrgicas. Es apasionante, tanto por la variedad de intervenciones, como por la posibilidad de poderlas combinar con tu propia creatividad, personalizando cada una de ellas.

 

“Conseguir una nariz que no parezca salida de una cadena de montaje es un reto y una motivación fantástica”.

 

Denota franca pasión por su trabajo. Si bien en el pasado la cirugía estética era considerada como una subespecialidad menor de la reconstructiva, pronto descubrí que aplicando el mismo respeto y rigor, podíamos conseguir mejores resultados, más integrados en el cuerpo del paciente.

¿Técnicamente, qué cirugía presenta más retos? Mi preferida es la rinoplastia. Es una de las más complejas y cada una de ellas supone un nuevo desafío. Conseguir una nariz personal, harmónica y bella, que no parezca salida de una cadena de montaje, es a la vez un reto y una motivación fantástica.

 

Honesto, técnico y respetuoso con la naturalidad, el doctor Oriol Vernetta combina su trabajo en el quirófano, “teniendo los deseos del paciente muy presentes”, con el mismo entusiamo con el que practica deporte o disfruta de su familia, sus principales pasiones, sin dejar de lado la astrofísica, la astronomía y la física de partículas. “Parecen hobbies un poco complicados, pero en ellos también se puede encontrar mucha belleza,” afirma con seguridad. 

 

¡Un reto que transforma vidas! La gratitud de los pacientes es lo que me gusta más de mi profesión. Jamás debería menospreciarse el dolor, la aflición que causa el no sentirse bien con tu cuerpo. Técnicas muy sencillas pueden suponer grandes cambios, mejorando la calidad de vida de las personas. El hecho de volver a la playa o a una piscina después de doce años sin pisarla por culpa de un complejo, es un ejemplo de ello.

¿Siempre trata problemas objetivos? Sí, siempre. Aunque es necesario empatizar con aquellos pacientes que tienen una percepción alterada de su imagen corporal. Cuando el sufrimiento que sienten no se corresponde con la realidad de su físico sino de una imagen distorsionada del mismo, la cirugía no va a poder solucionarlo.

Hablando de empatizar, ¿es cierto que usted le da la mano a sus pacientes en el momento de la anestasia? Sí. Es algo que me encantaría que hiciesen por mí si estuviese tumbado en una mesa de quirófano. Creo que la confianza y la calidez en ese momento marcan la diferencia.

¿Qué otras cualidades le diferencian de otros cirujanos? Soy honesto con las expectativas de mis pacientes y antepongo la naturalidad a los resultados forzados. Y me gusta pensar que cada cirugía es como un traje hecho a medida. Trato a mis pacientes como me gustaría que me tratasen a mí.

 

“Para que el paciente integre la cirugía en su cuerpo, es importante conseguir un resultado 100% natural y personalizado”.

 

¿Cree que sus pacientes tienen un estilo de vida determinado? Al contrario. Antiguamente, recurrían a la cirugía estética un perfil de personas preocupadas por su imagen, que hacían deporte y buscaban estar siempre perfectos. Hoy, cualquiera con un complejo sabe que puede contar con nosotros para mejorar su aspecto. La cirugía estética se ha convertido en algo para uno mismo, y no tanto para lucir.

La imagen es importante, pero a menudo tirana. La belleza no tiene dueño y tampoco es matemática, porque, además, se define de manera diferente en cada cultura. Está en los ojos de cada cual y cada cual tiene derecho a verse hermoso, mejorando aquellos aspectos que no le gusten de sí mismo. Para mí, hay más belleza en lo imperfecto, lo personal y lo que nos hace únicos, que en las formas más perfectas. Mi trabajo es apasionante porque consiste en hacerla aflorar.

¿En qué momento tiene la seguridad de que ha hecho una buena cirugía? Una cirugía estética es un éxito cuando el cerebro del paciente integra esa nueva imagen como algo propio, como si siempre hubiese sido así. Por eso es tan importante que el resultado sea natural y cien por cien personalizado.

 

¡Éxito en consultas virtuales!

Dada la excepcional situación post COVID-19, las consultas online del Dr. Vernetta han aumentado considerablemente, tanto por la eficacia como por la seguridad que comportan. 

T 666 682 710

Dr. Vernetta

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